Canción de Hielo y Fuego, la saga de Geralt de Rivia…no cabe
duda de que la literatura fantástica esta pasando por un momento muy dulce, con
sagas de gran calidad y que evolucionan lo escrito por Tolkien en su Señor de
los Anillos.
Se acabó eso de la lucha del bien contra el mal, de
personajes muy buenos, santos, y malos, diabólicos, en los cuales al lector no
se le daba la posibilidad de elegir bando, de ver otros puntos de vista.
Ahora no hay héroes, no hay batallas para salvar el mundo,
sino distintos planteamientos ante un mismo hecho, dando la oportunidad al
lector de cuestionarse cual de los bandos, personajes, actúa de manera correcta
y posicionarnos.
Dentro de estas grandes sagas, hay una que no tiene tanta
repercusión como la escrita por George R.R Martin, o las aventuras de Geralt, y
que, en mi opinión, estaría a la par en cuanto a calidad, profundidad de
Canción de Hielo y Fuego. Estoy hablando de la saga de Malaz: el libro de los caídos.
En este post daré mi punto de vista sobre su primer libro,
Los Jardines de la Luna. La saga escrita por Steve Erikson, aunque en el libro
pone que es rival de Canción de Hielo y Fuego, no es más que para incentivar la
compra, pero no le hace un gran favor, ya que no tienen nada que ver.
Los Jardines de La Luna versa (sin poner ningún destripe)
sobre la conquista por parte de Malaz, de la última ciudad libre que queda,
Darujhistan, y de la resistencia que se encuentra en esa ciudad (aparte de
poderes divinos que por alguna razón no quieren que se lleve a cabo la misión
con éxito) todo esto mientras una ciudad flotante amenaza a Malaz.
Con este telón de fondo, nos encontraremos a personajes carismáticos,
profundos, que van evolucionando mientras avanza el libro (Velajada, Anomander
Rake, Lástima, Kruppe, Mechones, Kalam, Azafrán…) cada uno de ellos actuando
por alguna razón, enemigos algunos ellos entre si, pero como he dicho al
principio, no hay nadie bueno ni malo.
El argumento no se queda atrás en cuanto a profundidad, ya
que, aunque la conquista de la ciudad siempre esta en el fondo, lo que nos
vamos a encontrar va a ser una guerra por asumir el poder, entre asesinos, ladrones…Además
añade la figura de los Dioses, con su respectiva jerarquía y siervos, que se meterán
de lleno en la contienda de alguna u otra manera, y que dan a la obra un toque
diferenciador de otras.
¿Pero cuál es la diferencia con Canción de Hielo y Fuego? La complejidad a la hora de leer el libro. En
la saga de Martin, todos los libros (del primero hasta el último) es una única
historia, y poco a poco nos va contando las distintas casas, sus características,
aspectos del pasado, donde vive cada una y porque, cuales son las características
geográficas del lugar (frío, calor, desierto…). La única dificultad que se
puede encontrar el lector es que su grosor le haga echarse atrás.
Sin embargo en Malaz no ocurre esto, y como bien dice su
autor en una introducción que hace, nos mete, desde la primera hoja, de lleno
en la acción, en la lucha por Darujhistan. No nos cuenta por qué el imperio
quiere extenderse, porque ha sido asesinado el rey y su “mano” ni quien lo ha
hecho, sino que nos presenta ya a los Abrasapuentes, a los magos, a los
asesinos, y la guerra que hay entre ellos.
A todo esto hay que añadirle la dificultad extra de los
dioses, ya que son muchos, no todos ellos de igual importancia, alguno de ellos
sombríos, otros del camino de la luz, y porque quieren impedir que Malaz
consiga el éxito. Tampoco nos explica que son las sendas, caminos o vertientes
de poder que utilizan los magos para la lucha, y que cada una de ellas es
distinta (una del camino de la vida, otra hacedora de caminos…).
Cada libro, además, es independiente, conserva algunos
personajes, dioses, trasfondo, pero nos cuentas historias distintas dentro del
mismo fondo (no se como explicarlo con letras). Pero, por lo menos a mi, y como
dice Steve, si aguantamos la primera cuarta parte del libro, aun no entendiendo
todo, nos vamos a encontrar con un saga que no tiene nada que envidiar a otras
del mismo género ,y, para mi gusto, mejor (por ausencia de “paja”) de Canción
de Hielo y Fuego, con personajes, situaciones, actos que nos quedaran grabados
en la mente.
No estoy de acuerdo en absoluto. Si bien no me parece mala la serie, sí me parece mediocre. Y en cuanto a la única historia de Canción de Hielo y Fuego, creo que estás bastante equivocado. Hay muchas, muchísimas historias de personajes, así como varias anteriores a la saga y una sutileza mucho más efectiva a la hora de (ejemplo) la magia. Por lo del carisma de los personajes, nuevamente, depende mucho de cómo lo veas. Si lo que te gustan son los personajes de rol superpumpeados (Ej.: el "drow" Anomander Rake), ponele. Pero me parece a mí que los personajes de Canción son considerablemente más complejos y disfrutables, desde la mierda de Cersei hasta el capo de Tyrion, pasando por los cinco mil personajes secundarios, cada uno con características propias. Y por lo del principio in media res, es una estrategia vieja como la humanidad, y no necesariamente es algo efectivo. Si nos ponemos a pensar, Canción deja muy en claro que los eventos cruciales sucedieron en el pasado -la Rebelión de Robert, el rapto de Lyana por Rhaegar, la Conquista de Aegon, el hundimiento de Valyria, y mucho, mucho, muchísimo más
ResponderEliminarIgual aprecio tu nota, y espero que no veas mi comentario como una bardeada.